MISERICORDIA

Las tragedias nos conmueven. Hacen aflorar nuestra misericordia y solidaridad. Para canalizar esos sentimientos altruistas, piensa en aquellos que fueron víctimas de la violencia. En silencio, dónales algunos segundos de tu amor. Eleva tu pensamiento a Dios y esparce rayos luminosos de paz y serenidad a quienes estén sufriendo. Dale esperanza a quienes estén sin esperanza. Acerca el corazón de tus hermanos al del Padre.