PACIENCIA


Las personas ocupadas crean vidas ocupadas. Y vidas ocupadas dan una sensación de prisa continua en la cual esperar por cualquier cosa nunca parece ser una opción. Pero después de un tiempo, la naturaleza agotadora de nuestras ocupaciones nos hace parar y reflexionar. Así oímos el llamado interior para adoptar un ritmo más lento que nos hace sentir la necesidad de hacer una pausa, de colocar un freno en la aceleración. Algunas veces ¿Ya decidiste conscientemente no detener algo por saber que en el fondo todo va a suceder de la manera correcta en el momento correcto? Los más veteranos y maduros tienden a hacerlo. Alguna vez, ¿decidiste no correr a un lugar al percibir que no puedes llegar allá más rápido de lo que tu modo de transporte te permite, y que no puedes controlar lo que surge en el camino? Los choferes de buses aprenden a hacerlo. También tienen que hacerlo los pilotos, en las carreras de Fórmula 1.


Mike George, Clear Thinking, 

Are you pacient or just the pacient, 22/05/11