Cuando surgen situaciones estresantes, practica estos tres pasos:
- Apártate mental y físicamente de la escena por algunos minutos.
- Ve nuevamente la situación como un espectador o observador desapegado; pregúntate si los pensamientos que surgen están yendo en la dirección que escogiste.
- En el silencio resultante, orienta tu pensamiento usando afirmaciones personales como "estoy consciente de que estoy calmado y pacífico" o "Soy el amo de mi mente".
A través de esta técnica puedes cambiar tus actitudes y sentimientos, influenciando positivamente las situaciones y la manera como los demás reaccionan.