Muchas veces nos sentimos influenciados por la negatividad de otros y no somos capaces de mantener nuestra positividad. En ésa atmósfera negativa, nuestras cualidades permanecen escondidas y también corremos el riesgo de volvernos negativos; por eso tenemos que ser como rosas fragantes. Necesitamos mantener nuestra originalidad y singularidad mientras convivimos entre espinas. En vez de decir que la negatividad de otros fue responsable de mi negatividad, necesito practicar mi positividad al usar mis cualidades.
Dr. Prem Masand