¿Quién podría ser responsable de nuestra vida excepto nosotros mismos? Somos responsables por cada pensamiento, sentimiento, creencia, percepción, actitud y acción. Y también por cada respuesta que creamos independientemente de las circunstancias o situaciones. Por eso, siempre habrá quienes, en circunstancias desafiantes, nunca reclaman. La habilidad de ellos en responder positivamente y proactivamente está fortalecida por la percepción que tienen de sí mismos como estando preparados para tomar responsabilidad completa por la calidad de su siguiente pensamiento y consecuente acción. Ellos no permiten ser dominados por los acontecimientos. Saben que la vida arremeterá con todos los tipos de situaciones sobre las cuales no tienen control. Pero, también saben que todo lo que pueden controlar es la respuesta que darán. A veces son llamados verdaderos líderes.